2016-I

Nicolás Vizcaino

Fiebre Supernórdica

Me contaron que en el barrio Santa fe –el distrito rojo bogotano– desde hace un tiempo se han ido asentado una comunidad de indígenas Emberás desplazadas forzosamente desde Risaralda. Al parecer, lo miembros más jóvenes de la comunidad, los nacidos en Bogotá, no hablan del todo emberá ni español, y son los que estan haciendo unas versiones contemporáneas de los Okamas y Otapas– collares coloridos tradicionales de esa comunidad–en las que por ejemplo aparece la bandera de Estados Unidos o un spiderman. La idea del proyecto entonces es, de manera similar al proceso de elaboración de los Okamas y los Otapas, hacer una cortina de chaquiras de 2 metros de altura y 1 metro 65 centímetros de ancho que tenga un patrón repetitivo de llamas de fuego. El objeto en sí está a medio camino entre esos accesorios indígenas y las cortinas de entrada que son usuales en prostíbulos del barrio donde ahora viven. El nombre obedece a que paradójicamente el barrio Santa Fe, quizás el más caliente de Bogotá, está de lado de una zona comercial de sistemas de refrigeración, entonces a pocas cuadras de Fiebre Disco Bar está el Local de refrigeradores Supernórdico. La imagen de los patrones de llamas de fuego, además de tratar el cambio en la figuración de estos objetos tradicionales es utilizar los colores comunes en su elaboración tales como el azul, el amarillo, naranja, morado, y hacer un comentario desde el código que representa una cortina de chaquiras que da a la calle, sobre el lugar liminal en el que ahora se encuentra ese grupo humano, una zona indeterminada, un espacio de excepción.